sábado, 3 de octubre de 2015

Banshee, augurio de muerte.

Espíritus que se aparecen a una persona para anunciar con sus gemidos la defunción de alguien...


Las Banshee son espíritus femeninos de la mitología irlandesa que presagian la muerte del oyente o de un pariente cercano a éste con sus desgarradores gritos. Son consideradas hadas y mensajeras de la otra vida.

La palabra «banshee» proviene de la traducción al inglés del irlandés «bean sídhe» o bien del gaélico escocés «bean shìt», que significa "mujer de los túmulos feéricos" o "mujer de paz".


«Banshee» ha sido traducida al español como «Alma en pena»


Cada banshee sirve a una de las familias irlandesas que en sus apellidos contienen los prefijos "Mac" u "O". Solo aparecen cuando un miembro de la familia va a morir en poco tiempo.

Era tradición que cuando una persona moría, una dama cantaba el lamento en el funeral. Estas mujeres eran las "keeners" y las mejores keeners eran las más solicitadas para cantar. Se dice que en las cinco grandes familias gaélicas (Los O'Gradys, los O'Neills, los O'Briains, los O'Conchobhairs y los Caomhánachs) la keener era una banshee. Ella cantaría el lamento cuando un miembro de la familia muriese, incluso si la persona había muerto lejos del hogar y la noticia de su muerte no era conocida aún. El llanto fúnebre de la banshee sería la primera advertencia que tendría la familia.

Las banshees muestran su respeto hacía los futuros difuntos llorando debajo de la ventana del moribundo y, a veces, volando por los aires. Cuando muchas banshees vuelan a la vez, es señal de que alguien importante o incluso de carácter sagrado va a pasar a mejor vida.


                                     
"y a veces volando por los aires..."


Una de las mujeres hada más famosas se llama Aibhill. Rondaba a la familia real de los O'Brien. Por lo que parece, el rey Brian Boru (el rey de Cashel, capital del antiguo reino irlandés de Munster) fue hacia la batalla de Clontarf en 1014 sabiendo que no volvería a ver a sus hijos nunca más, pues Aibhill había pasado por su castillo la noche anterior y había lavado la ropa de los soldados hasta que toda el agua se había llevado la sangre de las armaduras.


Aibhill.


Sus características son fácilmente reconocibles; Las Banshee siempre son mujeres; tienen el cabello muy largo, al igual que sus uñas; el vestido que portan desaparece en la parte inferior (por lo que sus piernas no son visibles) y su cuerpo es delgado y pálido. 

No suelen aparecer en el plano físico, pero cuando lo hacen se las puede ver como lavanderas que limpian la sangre de la ropa o como una perturbadora sombra en la lejanía.

Todos los oyentes del augurio de la banshee lo describen de forma diferente: para algunos es un bello canto, aunque para otros es equiparable al ruido que provocan unas uñas arañando una pizarra. Sólo coinciden en una cosa: te deja la sangre helada. Quizás sea porque se presenta de noche o porque su silueta provoca pánico con solo mirarla. Sinceramente, creo que lo que congela el alma es que en ese ruido está el aviso de una muerte inevitable.

El aviso de que el último aliento está siendo exhalado.




sábado, 28 de marzo de 2015

Trempulcahue, el transporte del Alma.

Las guardianas espirituales de los mapuches. 


Las Trempulcahue o Tempulcalhue son cuatro ballenas sobrenaturales pertenecientes a la mitología de los mapuches, un pueblo amerindio que habita en Chile y Argentina. 

Una Machi al convertirse en ballena.

Las Trempulcahue tienen forma de ballenas, pero en realidad son cuatro Machis (entidades religiosas y protectoras del pueblo mapuche) sentenciadas a transformarse en ballenas cada día a la caída del Sol. Estos seres sobrenaturales llevan las almas de los muertos hasta el "Ngill chenmaywe", lugar de encuentro espiritual que se relaciona estrechamente con la Isla Mocha, al frente de la provincia de Arauco, en Chile. A diferencia de otros guías espirituales, estas ballenas no pueden ser vistas por los vivos.

"Amuchura", La resurrección de las almas. Así llamaban los mapuches a Isla Mocha.
Para entender mejor la tarea de las Trempulcahue hay que conocer ciertas características de la religión mapuche. Para empezar, el alma del ser humano permanece en contacto con la naturaleza, por ello existe el Pu-Am, una ánima universal que envuelve todo lo que posee vida. De esta ánima universal se origina la de cada hombre, el Am, que acompaña su cuerpo hasta que muere. Sin embargo, no solo el ser humano tiene su Am: todo ser viviente posee su propia ánima, a excepción de los wekufe, un tipo de espíritu dañino ligado a la magia negra.

Cuando el hombre muere, su Am se convierte en Pillü y se resiste a alejarse de su cuerpo. El estado de su pillü es muy peligroso, ya que cualquier wekufe puede adueñarse de esa ánima y esclavizarla eternamente. Para salvarse, tiene que viajar a Ngill chenmaywe, isla que los muertos pueden alcanzar con las ayuda de las Trempulcahue. Cada ánima debe hacer una contribución en llancas (unas pequeñas piedras de color turquesa) para pagar el transporte. Este es el porqué de que al lado del difunto coloquen estas piedrecillas.

Las cuatro Trempulcahue realizando su eterna labor. 

Desde Ngill chenmaywe, las pillü se convertirían en alwe (espíritu), y en algunos casos, cuando una pillü alcanza la superación espiritual en la isla, puede lograr transformarse en un poderoso espíritu llamado pillán
Joya que representa un pillán.

Con el tiempo, los descendientes del difunto han perdido su recuerdo y, por fin, su alwe vuelve a reunirse al Pu-Am.  Así el ciclo alcanza su conclusión. 

Las Trempulcahue transportado una pillü.

sábado, 21 de marzo de 2015

Minairó por aquí, minairó por allá.

¿Cierto vecino ha obtenido una enorme fuente de ingresos sin jugar siquiera el cupón de la ONCE? No lo dudes; ha encontrado un canuto de los minairons.


Los minairons (singular minairó) son unos seres diminutos y muy trabajadores propios del folklore catalán. Concretamente se ubican en el Pallars Jussà y en la zona pirenaica de Cataluña, aunque también están presentes en la mitología del País Vasco.  Pueden ser conocidos como Menairons, Manairons, Diablorins, Femilians y Mamurrak (En el País Vasco).

Nuestros "muy pacientes" trabajadores.

Como he indicado, de ciertas personas que se habían enriquecido en poco tiempo se decía que tenían un canutillo con minairons. ¿Por qué? Bien, uno de estos canutos puede contener centenares de minairones. Al abrirse el canuto, los minairones hacen su aparición y acto seguido preguntan: què farem?, què direm? (¿qué haremos, qué diremos?). Si la persona que lo ha abierto no les ordena algo, vuelven a formular la misma pregunta. ¡Ay del pobre desgraciado que no haya ordenado aún la tercera vez! Los minairons, enfadados, apalizan a su dueño hasta la muerte. Pero si la orden es lo suficientemente rápida, lo hacen a la perfección y en un tiempo récord. Bastante impacientes, diría yo. Algún pobre viajero se topa de vez en cuando con un canuto de minairons y, conocedor de la leyenda, ordena a los serecillos que depositen rocas en las laderas de las formaciones montañosas, originando así las muchas tarteras que se encuentran por todo el Pirineo y salvando el pellejo. Cerca de la llanura de Taüs hay una inexplicable tartera en medio de un bosque. No hace falta aclarar de quien ha sido obra.

Si no se trata con mano firme a los minairons, lo más probable es que acaben construyendo tarteras sin parar.

Así pues, los minairons nacen de la Hierba menaironera, también llamada Hierba de San Juan, ya de florece y da fruto la noche del Solsticio de Verano. Crece en cuevas de mucha profundidad, guardadas por gigantes y dragones. La noche de San Juan, estos insólitos vigilantes permiten el paso a la cueva, pero sólo mientras duran las campanadas de medianoche (cosa que hace casi imposible hacerse con una de estas plantas).

Hierba de San Juan o Corazoncillo.

En definitiva: Los Minairons son unos muy útiles trabajadores pero, como acostumbra a pasar, les das la mano y te toman el brazo.